Blog Published

Blog_archdiocese-of-miami-supporting-the-abcd-a-pastors-perspective_S

archdiocese-of-miami-supporting-the-abcd-a-pastors-perspective


Como párroco, a menudo me conmueve la generosidad y fidelidad de nuestros feligreses. Veo una y otra vez cuán profundamente se preocupan por la Iglesia y por los demás. Este año, al comenzar la Campaña de Caridades y Desarrollo del Arzobispo (ABCD), nuestro arzobispo nos invita a reflexionar sobre la profunda importancia de dar y sobre cómo Cristo mismo nos llama a cuidarnos unos a otros.

A lo largo de los Evangelios, Jesús subraya la importancia de la generosidad. Enseña el verdadero discipulado que implica amarse unos a otros, cuidar de los pobres y compartir las bendiciones. En Mateo 25:35, Jesús nos dice: “Porque tuve hambre, y me diste de comer; tuve sed, y me diste de beber; era forastero, y me acogiste”. Estas palabras nos recuerdan que todo acto de generosidad es amor hacia Cristo mismo.

La Campaña de Caridades y Desarrollo del Arzobispo (ABCD) es una forma de llevar esperanza a los demás y ayudarles a experimentar el amor transformador de Cristo — un amor tan poderoso que puede curar a los enfermos, convertir corazones y cambiar la vida de alguien. Ya sea a través de la defensa de los derechos de las personas, la educación, la vivienda o el servicio a los pobres, por nombrar algunos, el ABCD lleva esperanza a los necesitados.

Todas las parroquias de la Arquidiócesis de Miami participan en la campaña del ABCD con metas de recaudación que varían según su capacidad y demografía. Somos una Iglesia unida en misión y llamada a apoyarnos mutuamente. A las parroquias con mayores recursos se les pide que den más, no como una carga, sino por un espíritu de solidaridad —porque las necesidades dentro de nuestra diócesis son grandes y como seguidores de Cristo estamos llamados a responder.

En la parroquia St. Augustine, nuestra meta es grande, como lo es para muchas otras parroquias. Sin embargo, no estamos solos en este esfuerzo. Al cumplir nuestra meta, ayudamos a que las parroquias de zonas menos favorecidas puedan cumplir sus objetivos. Cuando damos generosamente, afirmamos nuestro compromiso con la Iglesia universal y demostramos que cada parroquia, cada católico y cada persona es importante.

A menudo, pensamos en dar en relación con lo que podemos permitirnos cómodamente. Pero ¿qué pasaría si consideráramos el ABCD como una oportunidad excepcional para salir de nuestra zona de confort y ser caritativos de una manera que de otro modo no consideraríamos? Jesús nunca nos pide que demos sólo cuando es fácil — nos llama a un amor sacrificado, a una generosidad que nos pone a prueba y a confiar en Su providencia.

Piensa en la viuda del Evangelio que dio sus dos últimas monedas (Marcos 12:41-44). Su regalo era pequeño a los ojos del mundo, pero a los ojos de Dios, lo era todo. Lo mismo ocurre con nosotros. Todo lo que damos, sea grande o pequeño, se convierte en una bendición multiplicada en las manos de Cristo.

Jesús elige a personas comunes como tú y como yo para que sean Su presencia en el mundo. Somos Sus ojos, Sus oídos, Sus manos, Sus pies y Su voz. Cada uno de nosotros tiene un rol en la construcción de la Iglesia y en el servicio a los necesitados.

Así que hoy aceptemos esta invitación y tomemos en serio este llamado. No somos espectadores en la misión de Cristo; somos participantes. La Iglesia nos necesita, esta parte del Sur de La Florida nos necesita, y lo más importante, Jesús cuenta con nosotros.

Respondiendo con fe, generosidad y amor, podemos estar seguros de que cada regalo que ofrecemos refleja el amor de Cristo.

El P. Richard Vigoa es párroco de la iglesia St. Augustine en Coral Gables.

Add your comments

Comments from readers

Valli Leone - 02/10/2025 11:26 AM
Yes. Your article, Father Vigoa, reminds me that it is always more blessed to give than to receive. Cheerful givers with thankful hearts are pleasing to the Lord. Holy Spirit, show us how to love and how to give without expecting a return. Clothe us in this Archdiocese with heartfelt mercy for those in need, for refugees, strangers, the sick and hungry. Have your way in us, oh Lord – – and keep our church communities growing in faith, hope and love. Alleluia! 🔆🕊🔆

Powered by Parish Mate | E-system

This site is protected by reCAPTCHA and the Google Privacy Policy and Terms of Service apply