Sobre las escuelas y las universidades cat�licas

Monday, January 31, 2011

*Msgr. Franklyn Casale - St. Thomas University

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Como padres católicos, ustedes confían que sus hijos escojan una universidad que les prepare para una vida de liderazgo profesional y personal, y les ayude a adquirir un entendimiento global, además de experimentar una vida universitaria excitante. Ya sea que se hayan graduado de una escuela pública o católica, los estudiantes reciben una mayor consideración por parte de los patronos cuando sus historiales demuestran haber obtenido un grado universitario en una institución católica, dados los altos valores éticos y las perspectivas globales.

Nuestros hijos, especialmente los graduados de las escuelas superiores católicas, debieran considerar una universidad católica. Los cursos en religión y teología que se ofrecen en nuestra institución, tienen el propósito de estimular el pensamiento, la creatividad y un profundo desarrollo intelectual. Debemos crear consciencia entre nuestros estudiantes de que el desafiar sus mentes con preguntas relevantes y provocativas sobre la relación con la sociedad y con Dios, contribuirá a su desarrollo personal durante toda la vida. Donde mejor se brinda esta oportunidad es en una universidad católica.

El fundamento de la experiencia educativa en la universidad es el conocimiento adquirido e integral que se acumula en la universidad, en vez de la educación en secuencias, como sucede en la escuela superior. Nuestras universidades católicas aún cuentan con un currículo básico que enfatiza las humanidades, y requisitos en teología, filosofía, historia, lenguaje, literatura, ciencias y matemáticas.

El Papa Juan Pablo II escribió que “Mientras cada disciplina se enseña de manera sistemática y según sus propios métodos, la interdisciplinariedad, apoyada por la contribución de la filosofía y de la teología, ayuda a los estudiantes a adquirir una visión orgánica de la realidad y a desarrollar un deseo incesante de progreso intelectual” (Ex Corde Eclesiae, párrafo 20). Este acercamiento a la educación, preparará a nuestros estudiantes para distintos cambios de profesión durante su vida laboral.

Quizás sus hijos piensen que comenzarán una experiencia más costosa. Por eso es que deseo llamar su atención a la asequibilidad de una educación superior privada y católica. En la universidad de St. Thomas, ofrecemos una beca especial arquidiocesana para los estudiantes de las escuelas superiores católicas. Por lo general, las becas fluctúan entre $6,000 y $15,500. En estos momentos, la matrícula anual y las cuotas cuestan $22,770, y con ayuda del gobierno – que incluye becas estatales y federales – St. Thomas representa una buena opción asequible para los graduados de las escuelas católicas. En algunos casos, la ayuda económica pudiera cubrir el costo total de su matrícula anual, ya que los paquetes consisten de una combinación de becas, préstamos y oportunidades de empleo (los estudiantes en el programa de estudio y trabajo pueden trabajar hasta 20 horas a la semana si están matriculados a tiempo completo).

Para obtener más información sobre nuestros programas académicos, las becas por méritos, y la ayuda económica, les exhorto a que inviten a sus jóvenes a asistir a nuestro “Undergraduate Open House” pautado para el 19 de febrero a las 9 A.M., y confirmen su asistencia llamando a nuestra oficina de admisiones, al 305-628-6546. Mejor aún, motívenles a hacer una cita para una visita individual a nuestro recinto, de manera que puedan hablar con el personal de admisiones y de ayuda económica y con otros estudiantes, asistir a una actividad atlética, o dialogar con decanos y miembros de la facultad en el campo de su interés. Su universidad arquidiocesana les ayudará a que su búsqueda sea lo más fácil posible.