Este es el momento para la formaci�n

Monday, February 23, 2009

*Cheryl Whapham

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Debo comenzar a ejercitarme nuevamente. Solía hacerlo con regularidad; corría 20 a 25 millas cada semana, pero tuve que suspender las carreras cuando me lastimé la rodilla. Luego contraje matrimonio, trabajé a tiempo completo, y tuve tres hijos. El ejercicio ahora es parte de las cosas “por hacer”, precedido por preparar la cena, lavar la ropa, cambiar un pañal, limpiar el baño… Bueno, ya se imaginan.

Aunque todo lo que acabo de mencionar es absolutamente cierto y es una realidad de mi vida, debo tomar el tiempo para ejercitarme. Sería beneficioso tanto para mi salud física como para la mental. Pero permito que todo lo demás tenga prioridad sobre algo que debe ser fundamental. De hecho, hacer ejercicios durante 30 minutos tres veces a la semana, ayudaría a que las demás tareas fueran más fáciles. Ese es un argumento convincente.

¿No ocurre lo mismo con el ejercicio espiritual, con nuestra formación en la fe? ¿Tiene prioridad la formación sobre otras cosas, y mantiene esa posición en nuestras vidas, como se supone? ¿O acaso se encuentra al final en la lista de las cosas “por hacer”, un sitio al que nunca llegamos y que sólo se encuentra allí para fastidiarnos; que nos hacer sentir mal sobre nosotros mismos porque sabemos que debemos hacerlo, pero no lo hacemos?

Spanish Class

Cheryl J. Orwig Whapham
Directora, Ministerios Laicos y Formación de Adultos en la Fe

• University of Dayton's Virtua l Learning Community for Faith Formation (VLCFF)
• Archdiocese of Miami Lay Ministry and Adult Faith Formation